Después de interrumpir las donaciones unos meses, hemos retomado la colaboración con la Fundació Casa Asil de Sant Andreu de Palomar mejorando la organización y con energía renovada. Así, la comida cocinada que no se ha consumido y está en condiciones de ser aprovechada, se guarda en fiambreras y se congela hasta que la recoge el Rebost Solidari de Sant Andreu, que la distribuye entre personas y familias necesitadas. En un mes ya hemos recuperado 330 raciones, que han hecho un muy buen servicio.
Desde que empezamos el Pont Alimentari, Casa Asil nos ha ofrecido su apoyo y colaboración entusiasta, contribuyendo activamente a mejorar el proyecto. También agradecemos la buena disposición del personal de cocina, que siempre ha sido muy receptivo, y la donación de las fiambreras reutilizables de Valira. Esperamos que, siguiendo este ejemplo, otras empresas y entidades se animen a participar en el Pont!